GLAMAZON
REIRI
​
MEMO
​
Diseño: Azul O'Dominique
Entrevista y fotografía: Jerssair Romero y Azul O'Dominique
Redacción: Jerssair Romero
Corrección de estitlo: Cecilia D. Torres Rueda
La Capa de Memo Reiri
​
Al pensar en Drag lo primero que viene a la mente es tacones, maquillaje, extravanganza, mucho glitter, pelucas increíblemente peinadas y por su puesto el referente internacional: RuPaul. Sin embargo, siempre hay algo más que no vemos y que casi no conocemos. Muchos sabemos el arte de ser “Drag Queen” gracias al concurso estadounidense llamado “RuPaul’s Drag Race” pero, ¿Sabían que en México también hay un concurso llamado: “La Carrera Drag de la Ciudad de México”? Es pionero de este formato en el país y no todos los participantes son Drag Queens. ¿Sabían que, en una de las ediciones del concurso, uno de los ganadores fue el “Bio King”, Memo Reiri? Así es, en México el mundo Drag ha cobrado mayor visibilidad y se ha apoderado de muchos escenarios. En esta edición el equipo de GLAMAZON tiene para ti la historia del primer Bio King de la CDMX, el increíble y muy peculiar: Memo Reiri.
BIO KING
Ser Bio King en el mundo Drag
​
Pelucas, glitter, accesorios, vestuario y maquillaje es todo lo que sobresale en su sala; Es día de show y Memo y sus compañeros y amigos que también hacen Drag están preparándose para salir a darlo todo en el escenario. El ambiente es divertido y brillante. Son personas muy amables, sonrientes y muy coloridas, pero sobre todo creativas. Es impactante ver cómo cambian el look de una peluca y, especialmente, como cambian ellos al estar en personaje.
​
El Drag implica una personificación exagerada del sexo opuesto con el fin de entretener, hacer reír y reflexionar, pero ¿Qué pasa cuando un chico sigue siendo un chico al hacer Drag? A esta vertiente se le conoce como: Bio King y en CDMX, Memo Reiri es pionero.
Memo Reiri trabaja como “host” y hace presentaciones dos días a la semana en “Baby”, un bar ubicado en la Zona Rosa en la CDMX. Su drag le ha dado un lugar dentro de la comunidad muy especial a pesar de que en ocasiones ha sido desacreditado por otras Drag Queens quienes le han dicho que lo que él hace no es Dgra. Sin embargo, esto jamás lo ha desanimado:
“Descalifican mi Drag, dicen que no hago Drag; yo creo que hago Drag. Y si crees que no lo hago ni modo gracias por tu punto de vista si tu comentario no me sirve, ¿para que me engancho? Lo bueno lo agarras y lo malo lo desechas, así todos vivimos más felices y contentos”.
Pero no todo es desaprobación, mientras se hace las cejas, Memo pide la opinión de sus compañeros de piso, quienes con una sonrisa le dan consejos para lucir un mejor maquillaje, los cuales él acepta con una profunda dedicación: “Siempre nos damos consejos, pues así es como aprendemos y agarramos experiencia unos de otros, yo admiro mucho a mis compañeras pues de cada una siempre aprendo algo: que si la ceja, que si el truco para que no se bote... y yo tambien les digo cuando hay algo que mejorar. En general, el mundo Drag es así de mucho compañerismo y apoyo. Además es muy variado: están las bonitas, las showceras, las extravagantes, las cochinonas, estoy yo”. Ríe y continúa con su transformación.
​
Memo Reiri no es un Bio King super masculino, todo lo contrario. A este Bio King le encanta jugar con los clichés, disfruta "jotear" y le saca partido a la feminidad. Retoma rasgos como el mostacho, las cejas de catrín, un torso masculino al desnudo y lo combina con poses elegantemente femeninas, lo cual es la esencia de este pionero del Bio King.
Sombra aquí y sombra allá.
​
“Me tape la ceja como nunca me la había tapado… Horrible”, después de verse al espejo comienza a reírse y voltea a ver a Miss Imperia (su roomie), quien inspecciona detenidamente el maquillaje y le dice que aún puede ponerse otra capa de pritt, Memo hace caso y continúa con su maquillaje. “Buscar el equilibrio, que no se vea, que se tape bien, que no se bote con el calor. Es una de las cosas que más sirve para tu maquillaje, te estás quitando algo que ya tienes para hacerte algo nuevo jugando con tus proporciones y siempre, siempre se vale aceptar opiniones”.
​
Es fantástico ver a una persona cambiar de rostro en un par de horas, es hipnótico observar cómo, pincelada tras pincelada, se crea una preciosa obra de arte viviente que representa todo un discurso, una deconstrucción de la masculinidad y los clichés que le rodean. “El maquillaje te hace una cara nueva, es como una hoja en blanco y tu iluminas lo que quieras resaltar y contorneas lo que quieras ocultar” explica Memo. Su maquillaje paso a paso es como ver un tutorial, sus cejas han sido reemplazadas por unas más delgadas que cambian la proporción de sus ojos, donde no había bigote ha aparecido un mostacho muy fino y sus rasgos son más marcados. A pesar de lucir un rostro más afilado este continúa conservando las características masculinas como el mentón marcado y los pómulos pronunciados: Guillermo se ha ido y en su lugar está Memo Reiri.​
Memo Reiri:The Beginning
​
Cuando Memo era pequeño quería ser bombero y, ahora que ha crecido, el mundo Drag le ofrece la posibilidad de reinventarse en cada show: ha sido desde una piñata hasta un cura. No descarta la posibilidad de ser bombero en alguno de esos espectáculos que lo han vuelto tan famoso.
​
Todo comenzó en un lugar mágico, una fantasía de Zona Rosa: “La Sacristía”, un bar con temática teatral, queer, Drag, no-gender, de donde salieron las drags más representativas del medio, entre ellas, Memo Reiri, a quién no le preocupa si le hablan en masculino o femenino. Antes de que Memo Reiri naciera, existió una Drag Queen llamada: Sacrismina.
​
“La sacristía era un lugar que era una fantasía, hasta la fecha hay gente que sigue extrañando ese lugar” Afirma Memo con un tono de voz anhelante y una mirada que extraña aquel lugar. En La Sacristía, nació Sacrismina, una combinación de las palabras Sacristía y Guillermina, pues si no te pones nombre te bautizan, como le sucedió en aquel tiempo al ahora Bio King.
Cuando Guillermo se enteró que la vertiente Bio King existía en el mundo Drag, comenzó el nacimiento del icónico Memo Reiri, “Margaret y Ya es mi mamá Drag, es mi mayor referencia. Rompe el estereotipo de la figura Drag, es de las más cabronas de la CDMX, la admiro muchísimo“, expresa con la admiración que siente por esta talentosa Drag Queen que fue su amiga y compañera de trabajo en la Sacristía y que se convirtió en su madre Drag.
​
El nombre de Memo Reiri es muy peculiar pues Memo es un diminutivo de Guillermo; “Mi nombre fue porque no quería dejar de ser yo, o sea, no quería tener como otra persona, quería ser yo mismo haciendo algo medio loco y que siempre fuera yo mismo. Nunca me ha gustado que me digan Memo, era como un diminutivo y con o sin drag sigo siendo yo por eso lo hice”. Pero hay cosas que cambian cuando Guillermo se transforma en Memo Reiri, la más notable es su actitud extrovertida y el torso desnudo que predomina en cada uno de los looks que presenta; es parte de su esencia. “Me gusta que me divierto y jugar con todo esta fantasía con algo que jamás me imagine hacer es increíble. Jugar con la fantasía de algunas cosas. Soy muy tímido con mi cuerpo y en mi Drag casi siempre salgo con el torso desnudo. Cuando entro en personaje, es como de: ya me vale. Me siento muy cómodo con lo que hago”.
​
Para Guillermo fue muy sencillo entrar al mundo Drag: “Si lo vives así tal cual es una forma de expresión o un arte o una chamba como lo vea cada quien: no tienen porque decirte nada. Esa es tu seguridad. Pues no estás haciendo nada malo”. Memo Reiri es una sátira de la masculinidad jugando con los clichés que existen en la sociedad: Tiene un discurso que lo hace único e inigualable.
En el show ya se para sola… la capa.
​
“Me molestan mucho porque siempre traigo una capa. La he ocupado mucho para fotos y shows, y me dicen "ya párale con la capa". Me siento muy cómodo y pues de tanto uso ahora todos dicen que ya se para sola”. La Capa de Memo es ICONICA, todo el mundo la conoce y sin duda se ha vuelto parte esencial del personaje.
​
Memo se prepara para un show donde hará de torero y sí: usará la legendaria capa. La forma en la que elige un show y lo crea es muy singular. En esta ocasión la temática es libre, para preparar y realizar el espectáculo dice lo siguiente: “Un capricho que tengas es lo que muchas veces te lleva a armar tu show. Hoy haré "Americano" de Lady Gaga con un look de torero. Siempre pienso: me gustaría hacer esto, verme de tal forma y pues en general los shows que presento son de tres minutos porque así no se pierde la atención. El show siempre va a depender del lugar, de la canción y de no perder al público”.
Memo está listo para ir hacia Baby donde dará su show. Es magnífico acompañarlo durante su preparación.
¡Que comience el show! ¡En el escenario, la Capa de Memo Reeeeiriii!
​
Así es como la presentadora llama al escenario a Memo. Viste un pantalón blanco, una boina negra, un espectacular maquillaje blanco que recuerda a la mezcla de un mimo y un elegante catrín, y, por supuesto, la legendaria capa. Su look es único, las luces comienzan a parpadear sobre su silueta, creando sombras que se mezclan con las notas musicales de "Americano" de Lady Gaga, de algún lugar entre el público aparece un bailarín disfrazado de toro que se une a la coreografía. La gente grita, se emociona, chasquea los dedos y aplaude con entusiasmo.
El torero está por matar al toro, la icónica capa vuela con cada giro: Memo Reiri impone su presencia. La música terminar y el toro muere mientras las luces apuntan a Memo Reiri. El público comienza a aclamar a la capa hasta unir sus voces para gritar a coro: ¡Memo Reiri! ¡La Capa! ¡Memo Reiri! ¡La Capa! Las personas simplemente lo aman.
